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Escucha activa y corporalidad: El arte de escuchar con todo el ser

  • Foto del escritor: Enrique Chirinos
    Enrique Chirinos
  • 9 may
  • 2 Min. de lectura

En un mundo donde hablar rápido y responder al instante es la norma, pocas veces nos detenemos a escuchar de verdad. Pero la escucha activa no es solo una habilidad comunicativa, es una herramienta poderosa de liderazgo, conexión y transformación.


Escuchar más allá de las palabras


Cuando alguien te habla, no solo está usando palabras. También se comunica a través de su tono, su respiración, sus silencios y su cuerpo. Y tú también escuchas desde tu propia corporalidad: desde cómo estás parado, desde tu tensión o apertura, desde tu disponibilidad real o tu urgencia interna por responder.

La escucha activa ontológica implica estar presente con todo el cuerpo, y no solo con los oídos. Implica vaciar el juicio rápido, suspender la interpretación inmediata, y abrir espacio para que el otro se muestre.


La corporalidad como lenguaje


Nuestro cuerpo habla, aunque no lo digamos en voz alta. Muchas veces, el cuerpo revela lo que el lenguaje calla.

Un líder que cruza los brazos mientras dice "te escucho", un gerente que evita la mirada mientras pide compromiso, o un colaborador que sonríe pero tiene los hombros encogidos... todos están comunicando algo que va más allá de las palabras.

Cuando incorporamos la corporalidad como fuente de información, comenzamos a ver más allá de lo literal. Y también podemos intervenir mejor: acompañar desde la presencia, desde la apertura corporal, desde el silencio cómplice que contiene.


Escuchar también es liderar


Liderar no siempre es hablar o tener respuestas. A veces, liderar es crear el espacio para que otro se escuche a sí mismo. Para que pueda respirar su problema, explorar su miedo, conectar con lo que no sabía que sentía.

Esa escucha no se entrena solo desde la mente, sino desde la conciencia corporal. Porque cuando tu cuerpo está disponible, tu presencia también lo está.



Reflexión final


¿Desde dónde estás escuchando a tu equipo, a tu familia, a ti mismo? ¿Puedes sentir tu cuerpo mientras escuchas? ¿Puedes detectar la emoción que hay detrás de una frase sencilla?


El cuerpo no miente.

Escuchar es permitir que el otro exista más allá de mis urgencias.


En Senior Hut acompañamos a líderes a desarrollar una escucha más profunda, más humana y más transformadora. Porque un equipo que se siente escuchado es un equipo que puede avanzar.


Gracias por leer,


Enrique Chirinos

Coach Ontológico


 
 
 

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